Ya le hemos dado a conocer en ediciones anteriores, el síndrome de Mesías que aparentemente aqueja a Yasmín Juárez Medrán; quien presuntamente consciente de la presencia de cámaras, se muestra sumamente empática y dadivosa con la población y sus necesidades; eso sí, siempre y cuando se le de crédito en redes sociales, ya sabe usted, que se note que el rescate del municipio se hace a través de la sindicatura; por aquello de una posible postulación a la municipalidad para el siguiente periodo.
Cabe destacar que, en las últimas sesiones de cabildo publicadas por el mismo ayuntamiento, las cosas se han puesto álgidas entre sus miembros, con reclamos, dimes y diretes, en donde incluso Juárez Medrán ace referencia a que están siendo grabados, ¿coincidencia?
Aunado a esto, se encuentra el hecho de que se ha hecho mención en varias ocasiones de que si no se puede avanzar en el municipio es por culpa de las deudas de administraciones anteriores; ¿será que la falta de atención a diversos rubros se debe en su totalidad a esto? ¿También será culpa de administraciones anteriores que existan familiares de esta funcionaria fungiendo como autoridades auxiliares?
Lo que quedó evidenciado es que Yasmín Juárez, aparentemente haciendo uso de una increíble estrategia de imagen de buena samaritana, propuso donar 6 mil pesitos mensuales para apoyar a la ciudadanía; aunque, dicho sea de paso, aún no se cumple con la ley de transparencia para saber cuánto ganan los servidores públicos de Malinalco, porque es bien sabido que es justamente ella quien ostenta uno de los mayores sueldos dentro de la administración.
Cabe destacar que al síndico no le cuadraron las cuentas, pues dejo que al final del año donaría más de 100 mil pesos, pero en realidad son 48 mil pesos, tomando en cuenta los meses que le restan al año.
Y mientras siguen desgarrándose las vestiduras en cada sesión de cabildo, la ciudadanía malinalquense continúa exigiendo que Juan “Vargas” Leonardez se ponga las pilitas y no deje las riendas de la administración municipal en manos de alguien que posiblemente, tenga otros intereses futuros.
Ariz Vega