En ediciones pasadas le dimos a conocer lo Buena Samaritana que resultó la síndico municipal de Malinalco, Yasmín Juárez Medrán, que ante las cámaras prometió donar 3 mil pesos de cada una de sus quincenas para apoyar al progreso de la entidad, incluso pensando que donaría al final del año más de 100 mil pesos, lo cual fue corregido por otro miembro del cabildo al decir que serían 48 mil pesos aproximadamente.
Una de las razones en las que se basó para tomar dicha decisión fue el hecho de que tanto ella como el alcalde Juan “Vargas” Leonardez, son los que ostentan los sueldos más altos de la administración; sin embargo y derivado de esta declaración, la ciudadanía se cuestiona cuánto es el sueldo de estos servidores; puesto que hasta la fecha no han dado cumplimiento a lo estipulado por la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública, ya que a pesar de llevar más de 4 meses “trabajando”, no se han encontrado estos datos en su portal de Información Pública de Oficio Mexiquense (IPOMEX).
Así mismo, continúan echándole la culpa a administraciones pasadas del desorden que existe con los dineros, pero tampoco se ha dado a conocer la carátula del presupuesto de egresos para el ejercicio fiscal 2022, para ver si acaso lo presupuestado es muy diferente a los anteriores gobiernos municipales de los que tanto se quejan o si de casualidad se invertirá más en obra pública que en sueldos.
Así mismo, se debe destacar los comentarios de la Síndico en la sesión de cabildo número 19 en la que Yasmín Juárez aparentemente presiona a una regidora para que se sume a su “buena voluntad” de donación, diciendo: “¿No es un hecho que te sumas, regidora?”, cuando se supone que cada uno es responsable de sus propias decisiones.
Habría que ver si en Malinalco se respetan las antiguas recomendaciones del límite de las percepciones de los servidores públicos, que hasta 2020, lo que gana un alcalde no debía sobrepasar los 81 mil 166 pesos mensuales y el síndico no debía exceder el 85% del salario del edil, pero habrá que esperar a que se dignen a hacer púbicas las nóminas.
Y durante esta espera, la población malinalquense le pide al tesorero y a las personas encargadas de la transparencia, se pongan las pilitas con la situación, aunque a decir de algunos, no pueden esperar mucho de Reginaldo Hernández Mancio, ya que presuntamente, ocupa un lugar estratégico en la administración que incluso requiere título profesional y su nombre no aparece dentro del Registro Nacional de Profesiones, por lo que sus habilidades y características necesarias para ocupar el cargo que ostenta son cuestionables.
Qué lejos se encuentra la actual administración de ser lo que alguna vez pensó la ciudadanía, que veían esta alternancia partidista como un sinónimo de cambio y progreso; hoy no quedan ni las sombras de lo que se prometió en campañas.
Ariz Vega