De acuerdo con lo establecido por la Real Academia de la Lengua Española, la palabra “obsceno”, se define con el significado de grosero, escandaloso u ofensivo.
Así como la triste historia de Santa Cruz Atizapán, que hoy le vamos a contar; ahí tiene usted a este bello municipio de apenas 13 mil habitantes, de los cuales uno merodea la presidencia municipal, un priísta grande, con grandes ilusiones de crecer; el alcalde mejor conocido como Isaac “El osito” Reyes Salazar, quien dicen, podría estarse atendiendo a manos llenas con el presupuesto destinado para este año en el municipio y aquí le decimos por qué.
Los egresos para este ejercicio fiscal 2022 en Atizapán, están presupuestados en 85 millones 394 mil pesos, cantidad bastante tentadora que aparentemente este politiquillo está pensando cómo gastarse. Y es que, en el manejo del dinero municipal de sus compatriotas, llama mucho la atención que “el osito” bondadoso aparentemente se quiera servir con la cuchara grande, pues en el rubro de sueldos y salarios, específicamente en las compensaciones salariales, casi el 50% del presupuesto lo pretenda repartir entre sus más allegados esbirros.
Así es, amigo lector, este personaje parece como salido de las películas ToyStory que en una de sus ediciones presenta a un tierno osito con olor a frutas que navega con bandera de bondad cuando en la realidad es el villano de la historia; y para algunos atizapanses, Isaac Reyes es lo más parecido al “oso maloso” de la administración municipal.
Es realmente desilusionante que a pesar de que el Partido Revolucionario Institucional haya llegado nuevamente al poder en Atizapán, quien los representa sea un individuo al que al parecer lo que menos le interesa es el porvenir de su pueblo, porque apenas se vio sentado en la silla del ayuntamiento y presuntamente ya anda saboreando una buena tajada de la nómina, que, por cierto, comparte con sus achichincles, algo así como “Alí babá y los 40 ladrones”
Servirse del erario municipal con el casi 50 por ciento de lo que se gasta en total la administración en un año, a ojos de cualquier mortal suena obsceno, grosero e indignante, es como bien dice el dicho “sale más caro el caldo que las albóndigas” y a Atizapán podría salirle bastante caro el mal desempeño de sus autoridades municipales.
Así es como nuestro “reyezuelo osito” Isaac Reyes Salazar, empieza con el pie derecho en esta administración, echándole grandes cantidades a la nómina de él y sus allegados; datos que le daremos a conocer en una próxima entrega; pero no se vaya usted a sorprender, que no solo son los escandalosos números sino la manera en la algunos que ni siquiera son oriundos de este bello municipio, llegaron de la mano de Isaac Reyes para también engrosar sus carteras.
Ariz Vega