El pasado 17 de noviembre se llevó a cabo la 40a. Sesión Ordinaria de Cabildo del municipio de Calimaya, donde por unanimidad se aprobó el gasto para el desfile conmemorativo del inicio de la Revolución mexicana, que, en palabras del primer regidor, Erik Hernández Munguía, serían necesarios 350 mil pesos.
Resulta muy raro que el desfile se lleve a cabo el 18 de noviembre y que solo un día antes se apruebe tal cantidad de dinero para su organización. Pues una de dos: en solo un día se organizó, o de plano quieren verle la cara a la gente, aprobando un presupuesto de un día para otro como si no hubieran dispuesto de él antes y presuntamente podrían estar eludiendo su deber de transparentar esos gastos.
Más aún cuando el mismo primer regidor informó de la participación de tres bandas de música, que fueron la Banda de Tlayacapan de Morelos, la Banda de Vientos de la Cabecera de Calimaya y la Banda de Vientos de San Andrés Ocotlán. Pues de ser congruentes, primero se aprueba un presupuesto y luego se ve para qué alcanza, cuánto cobran las bandas y otros gastos. Pero al parecer en el gobierno de Calimaya se hacen las cosas al revés.
Por supuesto, Erik Hernández Munguía, mejor conocido solo como Erik Munguía, ya que quizá se avergüenza de quien le dio el primer apellido, omitió dar un informe detallado de lo que se haría con el dinero solicitado. Y este es otro elemento que apunta a que esta sesión de cabildo fue toda una pantomima para aprobar el recurso y que nadie pidiera cuentas de cómo se gastarían los 350 mil.
Llegado el día 18, se esperaba que con tal cantidad fuera algo espectacular, pero por supuesto, lo que salvó el desfile fue la participación de la sociedad y de la comunidad estudiantil, porque del Ayuntamiento no alcanzó ni para poner un templete.
Así que el gobierno de “Capulina” gastó en una lona para poner en la mampara, el uso de unas bocinas para oír al presidente, hojas para imprimirle reconocimientos a los participantes y 3 bandas de música. A menos que cada banda cobrara más de 100 mil pesos, no se explica en qué se fue tanto dinero. Y con todo el respeto que merecen los músicos, es excesivo ese gasto, sobre todo considerando otras necesidades del municipio.
Para rematar la total falta de congruencia, al alcalde “Capulina” no tuvo empacho mencionar a Francisco I. Madero y su lema de “sufragio efectivo, no reelección”, siendo un alcalde que ha gobernado en 4 periodos, además de trabarse lastimeramente en la lectura de su discurso. No cabe duda de que, con la práctica, cada vez menos vergüenza les da, lo que presuntamente, es inflar e inventar gastos a costa del erario público, ¿o usted, lector, cómo se explica tanto gasto aprobado un día antes?
Osvaldo García
