Justo cuando se pensaba que el gobierno municipal de Tenango del Valle no podía gastar más en aumentar el salario de sus trabajadores, sale a relucir un aumento más en las nóminas; en esta ocasión en el Sistema Municipal DIF que dirige Nayeli Zotea, presidenta “honoraria” del organismo y esposa del alcalde Roberto Bautista.
En 2022, según presupuesto de egresos, de los más de 12 millones de pesos que se contemplaron, 10 millones y medio fueron destinados a sueldos; sin embargo, para el 2023, en la carátula del presupuesto de egresos, se puede observar que en 2022 se terminaron gastando más de 15 millones en salarios de los 16 millones 625 mil pesos ejercidos.
En ese mismo documento, se puede observar que para este año están presupuestados 18 millones 285 mil pesos de los cuales 15 millones 211 mil son para nóminas. Aquí la pregunta es ¿a quién se le aumentó el sueldo dentro del DIF municipal?
Son varios los que ganarán más, pero uno de los más ostentosos es el del tesorero Roberto Estrada Ramírez, quien, de acuerdo con el tabulador de sueldos, ganó más de 162 mil de sueldo base, más de 162 mil de gratificaciones y 25 mil 466 de aguinaldo. Sin embargo, para este 2023, su sueldo base subió a 352 mil pesotes, más una gratificación de 155 mil pesos, un aguinaldo de 40 mil y una prima vacacional de 20 mil pesos.
En total, si las cuentas no fallan, el tesorero del DIF municipal de Tenango del Valle recibió un aumento de sueldo de 216 mil 565 pesos, por lo que pasó de ganar 350 mil 435 pesos en 2022 a 567 mil pesos en 2023. ¿Qué haría usted si en un año de trabajo le dan un aumento de tal magnitud?
Habrá que recordar que este 2023 en México, el salario mínimo tuvo un aumento del 20% y resulta indignante para el ciudadano que un servidor público con un salario de por sí nada despreciable, obtenga un aumento de más del 60%, ¿Qué pensarán las comunidades con rezago en diversos ámbitos de estos aumentos a las nóminas de sus gobernantes?
Ahora bien, para muchos no es un secreto que, en múltiples ocasiones, el “sueldo” que las primeras damas no reciben por ocupar un puesto honorífico, es obtenido a través de terceros, ¿será este el caso de Nayeli Zotea?
Pero la cosa no para ahí, ya que, de acuerdo con varios documentos firmados por dicho tesorero, aparece como L.C., lo que podría suponerse que significa Licenciatura en Contaduría, sin embargo, de acuerdo con una búsqueda realizada por este semanario, Roberto Estrada Ramírez no aparece en el Registro Nacional de Profesionistas de la Secretaría de Educación Pública, por lo que, al parecer, no cuenta con título profesional que lo avale para andar firmando como “Licenciado” ya que solo aparecen 3 registros con nombre “Roberto Carlos” los cuales son, un técnico automotriz, un maestro en pedagogía y un licenciado en educación con especialidad en historia.
Además de esto, es importante recalcar que existe la interrogante de si los documentos que pasan por las manos de este bien remunerado personaje tienen la validez suficiente.
Así mismo, no hay que dejar de lado las Leyes que en muchas ocasiones son las mismas autoridades quienes se atreven a pisotearlas, pues conforme a lo publicado en el Código Penal Federal; “Se sancionará con prisión de uno a seis años y multa de cien a trescientos días a quien, sin tener título profesional: se atribuya el carácter de profesionista, ofrezca públicamente sus servicios como profesionista o a quien use un título o autorización para ejercer alguna actividad profesional sin tener derecho a ello”.
No cabe duda de que llegar al poder no es sinónimo de honestidad o ética, además de que nuevamente queda demostrado el alcalde o sus allegados no son los únicos en recibir ciertos beneficios cuando de aprobar las nóminas se trata, pues hoy el DIF municipal también realiza cuestionables movimientos en sus finanzas y mientras eso sucede en los primeros 2 años de gobierno, habrá que esperar a ver qué sucede en el 2024, donde se vislumbra que muchos aplicarán el “año de hidalgo” con eso de los aumentos, las gratificaciones y varios gastitos de los que, por cierto, Bautista Arellano, nunca se queja.
Ariz Vega
