Apenas la semana pasada, la edición de este Semanario señalaba que, para la alcaldesa de Otzolotepec, Erika Sevilla Alvarado presuntamente no hay límites cuando de fiesta se trata, gastando desmesuradamente en todo tipo de festejos y bailes como si no hubiera necesidades en el municipio.
Y justamente una de esas necesidades en varias comunidades del municipio es el alumbrado público, ya que en muchas calles hace falta la infraestructura y otras donde ya están los postes, hace falta reparar las lámparas. Hay casos, como en la colonia Guadalupe Victoria, donde son los propios delegados y otros ciudadanos quienes se las tienen que ingeniar para reparar las lámparas y que haya luz en las calles, ya que por parte de la Dirección de Servicios Públicos no hay acciones oportunas para solucionar esto.
Asimismo, calles de Tetitla carecen de este servicio, mientras que en la colonia de la “Y”, los vecinos también han informado sobre la necesidad de reparar varias luminarias, ya que temen que la oscuridad en sus calles sea un detonante de delincuencia.
Es probable que el desinterés por estos asuntos se debe a que ni la alcaldesa ni su personal caminan por estas comunidades, y mucho menos de noche, de lo contrario sabrían de la urgencia de atender estas peticiones, que más que un favor, es una de las obligaciones que como gobernantes tienen.
Pero como ya se apuntaba antes, donde sí se puede ver a Erika Sevilla, aparte de en la televisión, es en las fiestas y festejos que organiza el Ayuntamiento, el cual ya está a punto de convertirse en el líder en entretenimiento en vivo del municipio.
Y es que se pudo ver a Erika bailando en la calle, con espuma y todo, en el inicio de la Feria de San Bartolo y, por cierto, se comentó que, por el contrario, no se le vio en la misa en homenaje a este Santo Patrono, a quien la fiesta rinde honor. Pero bueno, es costumbre de cierta gente presentarse sólo al bailongo y no a lo que verdaderamente sería lo fundamental de una tradición, como promovió a la feria la misma alcaldesa.
También, la presidenta estuvo bailando en los festejos del “día del adulto mayor” y posteriormente en la celebración del concurso de belleza de Miss México. Con ello, muestra la alcaldesa que para ella la presidencia es un gran evento social, más que una labor social y de servicio a la gente.
Además, estas actitudes y el hecho de que gran parte de sus apariciones públicas sean para “echar relajo”, puede confirmar lo que se rumora desde hace varios años, que son otras personas las que verdaderamente toman las decisiones en el municipio, por eso ella de nada tiene que preocuparse, y mucho menos de unas lámparas fundidas y de calles sin luz, al fin que ella, después de campaña, jamás volverá a pararse por esos lugares.
Osvaldo García