Tenango del Valle SIN LEY

Como se lo dimos a conocer en la edición pasada, los jaloneos dentro de la actual administración de Tenango del Valle están a la orden del día, esto debido a que, mientras Roberto Bautista Arellano, presidente municipal con licencia, se iba a hacer “campaña”, el Ayuntamiento quedó a la deriva, puesto que no se nombró como es debido a un presidente municipal por ministerio de Ley que supliera al alcalde en su ausencia.

Durante la sesión de Cabildo con fecha 8 de mayo, miembros del cabildo señalaron que el encargado de despacho que dejó Roberto Bautista carece de legitimación, toda vez que el permiso que solicitó el edil rebasa los 15 días de permiso, esto de acuerdo con el artículo 41 de la Ley Orgánica Municipal.

“El secretario del Ayuntamiento carece de legitimación para poder representar la envestidura del presidente municipal, por lo tanto, quien ha presidido las sesiones no estaba legitimado para hacerlo”, manifestaron.

En este sentido, señalaron que las actas correspondientes a las fechas 24 abril y 3 mayo pudieran carecer de validez, por ello, se han ingresado diversos oficios para informar de estos hechos a la Contraloría del Poder Legislativo, al Instituto Electoral del Estado de México, así como a la Legislatura del Estado de México.

Miembros del cabildo piden que se presente Roberto Bautista y cumplir con lo que manda la ley y designar a un presidente por Ministerio de Ley, ya que pidió permiso para ausentarse 41 días y no 15 días, en los que sí se pudiera quedar al frente un encargado de despacho.

Otros por su parte, señalaron que debe ser la Legislatura quien determine qué procede, y luego luego salieron a defender al Secretario del Ayuntamiento y al candidato Roberto Bautista, diciendo que la ley no establece qué hacer, en caso de que no se rechace una propuesta a presidente por ministerio de ley, como quien dice, el hoy encargado del despacho de la presidencia municipal les “echó la bolita” a los regidores y la síndico por no estar de acuerdo con la propuesta de Roberto Bautista.

Mientras tanto, querido lector vaya por unas palomitas para ver en que acaba esta novela de la vida real.

Lety Serrano