Crisis por falta de agua en Joquicingo

Una grave situación aqueja a los habitantes del segundo barrio de Joquicingo, quienes llevan más de una semana sin suministro de agua potable, debido a que el encargado de abrir las válvulas que permiten el flujo del vital líquido no ha cumplido con su labor. La población, desesperada, exige una solución inmediata y respuestas claras por parte del gobierno municipal que dirige Rausel Cervantes, pues tiene la responsabilidad de brindar este servicio público.

Desde hace quince días, los vecinos han estado padeciendo una crisis hídrica que se ha prolongado más de los esperado. Según testimonios de los residentes, el problema radica en la falta de apertura de las válvulas principales que distribuyen el agua a las distintas zonas del municipio. Los habitantes han recurrido al Ayuntamiento en busca de su apoyo para resolver este problema o que los apoyen con pipas mientras se resuelve el problema.

La ausencia de agua ha tenido un fuerte impacto en la vida cotidiana de las familias del municipio. Negocios locales y escuelas pueden verse afectadas por la carencia del recurso. Además de que esto posiblemente lleve a un aumento en los servicios de pipas privadas, haciendo más difícil para las familias de bajos recursos acceder al líquido.

La falta de apoyo por parte del Ayuntamiento no sólo pone en riesgo la salud y bienestar de los habitantes, sino que también está provocando una creciente desconfianza en la capacidad de la administración local para manejar crisis de este tipo.

Los ciudadanos de Joquicingo hacen un llamado urgente a las autoridades estatales para que intervengan en la situación y briden una solución definitiva a la crisis del agua, que sigue afectando gravemente a cientos de personas en el municipio.

“Esto ya no es solo una cuestión de incomodidad, ahora es una emergencia sanitaria, no se puede seguir viviendo si no se tiene agua para las necesidades básicas de higiene”, señalaron los afectados.

 

 

Uriel Rosales

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