Un presunto abuso de autoridad ha sacudido a la comunidad de Tianguistenco luego de que un ciudadano denunciara haber sido testigo de una agresión física por un elemento de la policía municipal, quien además habría amenazado con represalias si difundía el incidente en redes sociales.
Según los testimonios de algunos ciudadanos, el altercado ocurrió cuando un elemento de la policía municipal empujo a un hombre hasta su vehículo mientras estaban discutiendo sobre la acera, cuando el ciudadano se disponía a subir a su vehículo, el policía le sujeto la puerta del vehículo impidiendo su movilidad, hasta que llamó a más policías para seguir amenazando al ciudadano. La difusión parcial de las imágenes en grupos locales de redes sociales ha generado una ola de indignación.
Hasta el momento, las autoridades municipales no han emitido ningún comunicado oficial sobre lo ocurrido, lo que ha aumentado el descontento entre la población.
Este incidente no es un hecho aislado en Tianguistenco ya que esta es no es la primera vez que se ve este tipo de comportamiento violento por parte de la policía municipal bajo la actual administración de Enrique Guzmán. Los ciudadanos han señalado repetidamente la falta de control y profesionalismo en las filas de la policía, así como la negligencia del Ayuntamiento para investigar y sancionar estos actos.
Hasta el momento, ni el edil ni ninguna otra persona han dado declaraciones oficiales sobre este grave incidente, lo cual ha generado aún más descontento entre la población. El silencio de las autoridades solo evidencia la falta de voluntad política para garantizar el respeto a los derechos humanos y poner fin a este tipo de abusos. El clamor popular exige respuestas inmediatas y sanciones ejemplares contra los responsables, tanto el agresor directo como aquellos que, desde sus posiciones de poder, permiten que este tipo de atropellos sigan ocurriendo con total impunidad.
Es inaceptable que en una sociedad los encargados de proteger a la población terminen siendo sus principales agresores. La sociedad no puede ni debe tolerar más atropellos de este tipo, y es responsabilidad del Ayuntamiento, empezando por su alcalde, tomar cartas en el asunto de manera inmediata.
Uriel Rosales