Mientras el presidente municipal de Tenango del Valle, Roberto Bautista Arellano, anda más preocupado por ver a quien le amenice su 3er Informe de Actividades (lo de los resultados lo dejamos a su consideración, amigo lector), contratando a Saúl “el Jaguar” para presentarse después del evento; la no tan nueva, rezagada, cuestionable y gris realidad que impera en el municipio continúa siendo el pan de cada día de los ciudadanos.
Desde el primer año de gestión de este politiquillo chapulinezco, le dimos a conocer el afán de Bautista Arellano por persuadir a la ciudadanía sobre su “genuino” interés en regular la situación del manejo de residuos sólidos de la entidad; para nadie es secreto los tantos y tantos millones gastados en renta de camiones de basura, por poner un ejemplo; eso sí, con el rumor por delante de un aparente beneficio obtenido a través de cierta empresa familiar dedicada justamente a un giro que tiene que ver con la basura.
Sin embargo, un tema recurrente y preocupante el de los residuos que proceden de la implementación de agroquímicos en la floricultura, actividad que muchos tenanguenses realizan y que, probablemente sin saberlo, estaría poniendo en riesgo su salud.
Comunidades como Balderas o Tlanixco son lugares donde se ha hecho hincapié sobre la responsabilidad, no solo de los propios usuarios sino de las autoridades para implementar acciones que mitiguen el riesgo del uso y el tiradero de estos envases.
A mediados del 2022, Pueblo Nuevo mantenía un aparente tiradero a cielo abierto de este tipo de residuos, lugar que, al ser visitado a últimas fechas por esta casa editorial luce no más esperanzador que antes, pues i bien ahora hay bolsas repletas de envases, se puede notar que aun existe material tirado como si nada, incluso se observa que se han realizado quemas de basura, ¿será que incendiar la basura es más rentable que gastar en una correcta recolección y tratamiento de envases de agroquímicos?
Cabe destacar que, en múltiples ocasiones, la actual administración se ha vanagloriado con el trabajo de la Dirección de Medio ambiente, quienes tienen a bien hacer la labor de recolectar esta basura, eso sí, muchas veces sin el material necesario para hacerlo, como el uso de cubrebocas; y es que el uso y exposición de este tipo de elementos químicos en el ambiente y en contacto con la población deriva en altos riesgos de salud pues se ha comprobado que la exposición con estos agentes químicos ha derivado en muchos casos en cáncer, dermatitis, afecciones pulmonares, perdida de embarazos, leucemia y hasta mal formaciones genéticas; esto sin dejar de contar con la contaminación de suelo, aire y ruido visual que da pésima imagen al municipio.
Mientras tanto, las prioridades del llamado “Padrino Mágico de Tenango del Valle” continúan, con calles deplorables, gastos millonarios en la cabecera municipal con rehabilitaciones aparentemente innecesarias y hasta presuntos despidos injustificados, eso sí, esta tarde usted podrá gozar de un gran espectáculo de regional mexicano después del 3er Informe de Bautista Arellano, porque dicen por ahí: “pan y circo”; aunque las comunidades se estén desmoronando; en fin, la hipocresía.
Ariz Vega
