En los últimos años en el Estado de México se ha establecido la tendencia de crear lagos y presas artificiales para la captación de agua de manera ilegal, en especial en zonas de lujo en la entidad mexiquense de Valle de Bravo, situación preocupante por e impacto ambiental y el desequilibrio hídrico que puede traer dicha práctica.
Por tal motivo, La Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) y la Fiscalía General de la República, aseguraron un predio de 500 hectáreas en el cual se habían construido una serie de lagos artificiales los cuales se alimentaban directamente de los escurrimientos del Nevado de Toluca.
Situación preocupante ya que a partir de estos escurrimientos es como se alimenta la presa Miguel Alemán, ubicada en el municipio mexiquense. Dicha presa es importante ya que en sus 29,000 hectáreas se capta el agua necesaria para alimentar al Sistema Cutzamala, que abastece al 25% del Valle de México.
En este operativo llevado a cabo con apoyo de la FGR, se realizó un cateo derivado de una denuncia por el cambio ilegal de uso de suelo, situación que ha derivado un sondeo para identificar más predios que forman parte de esta práctica riesgosa que supone un desequilibrio ambiental para el Estado de México.
Josué Areval