El pasado martes, vecinos de Lerma reportaron que dos hombres comenzaron a tapar baches por su cuenta en calles cercanas a los límites con San Mateo Atenco. La sorpresa fue que, a pesar de no ser trabajadores del ayuntamiento, estos hombres estaban pidiendo una cooperación a los automovilistas que pasaban por ahí, con el argumento de que estaban ayudando a mejorar el tránsito.
Aunque sus intenciones pueden parecer buenas, esto pone en evidencia algo más preocupante: el abandono de las autoridades municipales, que deberían ser quienes se encarguen de estas labores con materiales adecuados, personal capacitado y, sobre todo, sin cobrarle un peso extra a los ciudadanos. Tapar baches no es un favor, ¡es una obligación del gobierno!
Además, preocupa la calidad de los materiales que se están usando. No es lo mismo poner tierra o grava con una pala que hacer un trabajo profesional que dure. Y aquí es donde los vecinos alzan la voz: ¿cómo es posible que dos personas con una carretilla y unas palas estén haciendo más que el ayuntamiento entero?
Este tipo de situaciones, aunque parecen pequeñas, reflejan la gran ineficiencia del gobierno de Lerma, que año con año presume presupuestos millonarios para obras públicas, pero en la práctica no vemos resultados. Es frustrante ver que en lugar de cuadrillas municipales, son los ciudadanos quienes terminan arreglando los problemas con sus propios medios.
Y no es solo el tema de los baches. También están las constantes inundaciones en zonas clave del municipio cada vez que llueve fuerte. Ya son muchos los reportes de calles convertidas en ríos y negocios afectados por el agua, mientras el gobierno municipal no da soluciones concretas. Por eso, empresarios y vecinos llevan tiempo pidiendo una auditoría seria sobre el uso de los recursos destinados al mantenimiento urbano.
Los vecinos ya están hartos. Hacen un llamado urgente al Ayuntamiento de Lerma para que deje de hacerse de la vista gorda y atienda no solo estas prácticas informales, sino todas las situaciones que se vienen acumulando desde hace meses. Y más allá de eso, cuestionan directamente al presidente municipal Miguel Ángel Ramírez Ponce, quien, según dicen, sigue sin dar la cara ni respuestas claras ante todos estos problemas.
Mientras tanto, el pueblo hace lo que puede. Pero no es justo que los ciudadanos tengan que sacar la pala cuando hay un gobierno entero supuestamente trabajando para eso.
Este tipo de situaciones, aunque parecen pequeñas, reflejan la gran ineficiencia del gobierno de Lerma, que año con año presume presupuestos millonarios para obras públicas, pero en la práctica no vemos resultados. Es frustrante ver que en lugar de cuadrillas municipales, son los ciudadanos quienes terminan arreglando los problemas con sus propios medios.
Y no es solo el tema de los baches. También están las constantes inundaciones en zonas clave del municipio cada vez que llueve fuerte. Ya son muchos los reportes de calles convertidas en ríos y negocios afectados por el agua, mientras el gobierno municipal no da soluciones concretas. Por eso, empresarios y vecinos llevan tiempo pidiendo una auditoría seria sobre el uso de los recursos destinados al mantenimiento urbano.
Los vecinos ya están hartos. Hacen un llamado urgente al Ayuntamiento de Lerma para que deje de hacerse de la vista gorda y atienda no solo estas prácticas informales, sino todas las situaciones que se vienen acumulando desde hace meses. Y más allá de eso, cuestionan directamente al presidente municipal Miguel Ángel Ramírez Ponce, quien, según dicen, sigue sin dar la cara ni respuestas claras ante todos estos problemas.
Mientras tanto, el pueblo hace lo que puede. Pero no es justo que los ciudadanos tengan que sacar la pala cuando hay un gobierno entero supuestamente trabajando para eso.
Diego Sánchez
«ciudadanos le hacen la chamba a Lerma”
