El auto invisible de Joquicingo
Se supera por mucho el presupuesto para vehículos, pero no hay rastro de lo que se adquirió
Poco será recordado el paso de Rausel Cervantes, el “mayestro”, por la presidencia municipal de Joquicingo, pues a pesar de su supuesta formación académica, no hay mucho que resaltar de su gestión, y eso sólo hablando de cosas buenas, porque de las otras… ahí sí hay mucho qué comentar.
Por ejemplo, en el aspecto de adquirir nuevos vehículos para el ayuntamiento, parece ser que se han adquirido automóviles que nadie ha visto, quizá se deba a que son de tecnología de punta porque cuentan con la tecnología de la invisibilidad o que estén guardados para que no se gasten. Esto porque de otra forma no se explica por qué en el Estado analítico del ejercicio del presupuesto de egresos detallado, en su clasificación por objeto del gasto, se excede por mucho la cantidad presupuestada en el rubro de vehículos y equipo de transporte, el cual estaba asignado para este año un monto de 238 mil 201 pesos, y que apenas en los dos primeros trimestres de 2023 ha ascendido a la cantidad de 565 mil pesos, que fue la cantidad que se pagó, dejando todavía un subejercicio, o lo que es lo mismo, lo que superó el presupuesto, que es de -326 mil 798 pesos.
Ahora la pregunta del millón: ¿qué se compró con ese dinero y por qué superó por mucho la cantidad que está originalmente en el presupuesto? Si se compraron nuevas unidades, ¿dónde están?
Con esa cantidad, más de medio millón de pesos, por supuesto que alcanza para un automóvil, y hasta para dos, sin embargo, no se ve en qué se gastó ese dinero, pues Rausel no ha entregado, en lo que va del año, ni un solo vehículo para el patrimonio municipal.
La ya acostumbrada falta de transparencia en materia financiera en la administración de Rausel limita mucho obtener respuestas para aclarar las dudas a los joquicinguenses, por lo que este escandaloso aumento del gasto en el rubro de vehículos se tendría que ver en las calles, en apoyo a la población, y no prestarse a la sospecha fundada de que hay algo mal en las adquisiciones del municipio, que alguien está saliéndose del presupuesto, tal vez comprando por capricho o tal vez haciéndose de un “incentivo” para beneficio personal, por ello valdría la pena aclarar el aumento en el rubor mencionado y si es que todavía se debe.
Asimismo, no se ve que los presupuestos asignados para obras públicas, para mejora de servicios, seguridad o educación estén también reventados de tanto meterles dinero, casualmente es en vehículos donde se puso imaginativo el “mayestro” Rausel y a lo mejor hasta sale con que compraron el auto invisible, que ahí está, pero no se ve.
En lo que va de la gestión del “mayestro”, únicamente se han entregado 3 vehículos, y de eso hace ya más de un año, 24 de junio de 2022, cuando se anunció con bombo y platillo la adquisición de nuevas patrullas para el muncipio, una de las cuales fue “acondicionada” con un monto de 50 mil pesos, solo por ponerle torreta y rotularla como patrulla, como se documentó en este Semanario en su momento.
Fuera de ahí, de ninguna otra adquisición de vehículos se tiene registro en esta administración, pues más allá de ver la necesidad de mejorar la seguridad o la adquisición de una ambulancia o demás vehículos que pudieran servir para darle mejores servicios a la gente, el alcalde ha estado muy ocupado como para gestionar nuevas unidades para el municipio. Incluso la administración pasada adquirió camiones para recolección de basura, pero el “mayestro” ni eso.
Osvaldo García
