Joquicingo

¿Deuda eterna en Joquicingo?

A más de un año de adquirida, no se avanza en el pago

Dicen que lo que mal empieza, mal acaba y hay que recordar que la administración de Rausel Cervantes, el “mayestro” que prometía “cambiar el rumbo” y demás demagogia, de las primeras cosas que hizo como presidente fue endeudar al municipio, adquiriendo deuda pública por la cantidad de 6 millones 325 mil 398 pesos.

Esto más la deuda que se arrastraba en la entidad, que es de 4 millones 445 mil pesos, la deuda del municipio ascendió hasta los 10 millones 770 mil 398 pesos.

Se pensaría que como dijo en su primer informe de gobierno el “mayestro”, se haría todo lo necesario para sanear las finanzas del municipio, se pagaría la deuda y todos disfrutarían de las mieles del cambio que tanto repetía como candidato y como alcalde.

Pero la triste realidad es que, hasta mediados de este año, la deuda está lejos de desaparecer, pues el último informe de endeudamiento neto indica que todavía hay por pagar 7 millones 284 mil 914 pesos. O sea, que, a más de un año de haberse endeudado, no se han pagado más que 3 millones de pesos, lo que hace pensar que, a este paso, no se terminará en este trienio de “sanar” las finanzas, como lo viene prometiendo Rausel.

Poco tiempo tiene Rausel de haberse metido al fangoso terreno de la política, pero en lo poco que hay de su trayectoria ya se puede ver qué clase de político es, pues parece que se le hace fácil hablar, aunque luego, ya en la realidad al parecer no cumpla con lo dicho, quién sabe si por complejo de pinocho o porque de a tiro la lengua va más rápido que las neuronas.

Lo cierto es que se ve difícil que se logre dejar al municipio libre de deuda, pues para ello se tendrían que ocupar recursos importantes en otras áreas, principalmente en obra pública. Basta recordar el año pasado, donde se veía que había recurso y se le veía a Rausel muy sonriente inaugurando calles. Pues cómo no, si con los créditos hay hasta para aventar dinero. Y comparado con este año, apenas se ve al presidente en una que otra obra, ya que no es lo mismo estirar la mano para pedir, que tener que apretarse el cinturón para pagar.

A ver con qué explicación sale en diciembre, con su segundo informe, si es que alguien le recuerda lo de sanear las finanzas municipales y pagar las deudas, porque poco se ha avanzado en pagar y no vaya a ser que, a pesar de ser un político novato, Rauselito salga como los colmilludos de antaño, esos que se hacían ricos y dejaban a su pueblo endeudado.

Osvaldo García

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