Como si no hubieran sido suficientes los más de 134 millones de pesos que el gobierno que encabeza Roberto Bautista Arellano se gastó durante su primer año de gobierno en sueldos y salarios del ayuntamiento, para este 2023, se ha presupuestado un escandaloso aumento de aproximadamente 18 millones de pesos.
Cabe destacar que, en general lo ejercido en 2022 fue de casi 308 millones y para este año se pretenden gastar más de 362 millones, es decir más de 50 millones, de los cuales 18 irán a pagar las remuneraciones de los servidores públicos; cifra escandalosa que ya de por sí, ha sido bastante criticada cuando existen sueldos como el del alcalde que se llevó en su primer año un aproximado de 1 millón 100 mil pesotes, regidores ganando arriba de los 800 mil al año al igual que el tesorero y un director con un salario de más de 900 mil pesotes al año.
Quizá los ostentosos gastos que realiza el gobierno municipal en festejos sirvan para mantener contenta a la gente y a sus propios trabajadores con sueldos menores, y no pongan “el grito en el cielo” una vez que se den cuenta de que esos 18 millones extras podrían ser destinados al aumento de varios de los salarios de los jefes, situación que aún no se puede saber porque, lamentablemente, la actual administración sigue sin actualizar la información en sus páginas de transparencia.
Además ¿De qué manera, el aumento de sueldos de sus servidores públicos beneficia a la ciudadanía de Tenango del Valle?
El colmo de la situación es que en próximas semanas se comenzará a vivir la fiebre de las campañas electorales a la Gubernatura del Estado de México, esa en la que la familia Bautista Zotea se ha visto muy involucrada, con discursos que intentan respaldar a la Cuarta Transformación, sobre todo en cuestiones de austeridad, cosa que presumiblemente no existe en Tenango del Valle.
Para los tenanguenses continúa siendo un acto de desfachatez y cinismo que con tan excesivos gastos que se realiza en el gobierno de Bautista Arellano, todavía se atrevan tanto él como su esposa Nallely Zotea a hablar de los principios morenistas que no aplican cuando de llevar agua a su molino se trata.
Ojalá la Nueva Realidad que impere en Tenango no sea la de seguir gastando el presupuesto en vanalidades, cuestionables inversiones millonaria y aparentes intereses propios, porque, aunque todo cae por su propio peso y en algún momento será la Comisión de Planeación y Gasto Público en conjunto con el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México, quienes se encarguen de hacer las observaciones pertinentes; a fin de cuentas los más afectados son los ciudadanos, porque un aumento a los salarios de funcionarios significa menos dinero para cubrir las necesidades realmente prioritarias de los tenanguenses.
Ariz Vega