¿Todo a la campaña?
Fugas de agua y otras urgencias que el Ayuntamiento de Calimaya no resuelve
La popular frase de “quemar las naves” ha sido sinónimo de lanzarse por un objetivo de manera desesperada, renunciando a la posibilidad de dar marcha atrás ante un eventual fracaso. Al parecer esto es lo que está pasando en el interior del Ayuntamiento de Calimaya, pues parece que andan todos muy ocupados tratando de colocar al llamado “tesorero de chocolate” como el sucesor del cacique en turno.
Sin embargo, en este “quemar las naves” va implícito un abandono de las obligaciones que como gobierno deben cumplir en el Ayuntamiento, así se deja ver, por ejemplo, con una nueva fuga de agua en Villas del Campo.
Como recordará el lector, apenas en noviembre pasado se exponía el caso de la fuga en uno de los pozos de este fraccionamiento, el cual, a decir de los vecinos, lleva años sin ser atendido. Hoy en día, una fuga mucho más grande llama la atención y la preocupación de los habitantes de esta zona, pues es abundante el agua que se desperdicia, y nuevamente, no han recibido respuesta por parte de Opdapas Calimaya.
Vecinos indican que marcan a Opdapas y no hay respuesta, además comentan que las autoridades encabezadas por el presidente municipal Oscar Hernández Meza no quieren cambiar las válvulas, ni la bomba, pese a que ya tienen varios años de servicio y no las quieren reemplazar.
Da la impresión de que medio mundo ya anda sumándose a la campaña, la cual, como aseguró Alexis Garay, ya lleva dos años y contando, dejando de lado sus obligaciones para con los calimayenses, a pesar de que se esté tirando el agua a plena vista, sin que hay un gobierno que muestre el mínimo interés.
Cabe recordar que Opdapas recauda alrededor de 21 millones de pesos anuales, según los presupuestos de ingresos de años anteriores. Sin embargo, más de la mitad de ese dinero se va en nóminas, es decir que para pagarles a los que laboran en Opdapas se ocupa la mayoría del dinero que paga de agua la ciudadanía. Así, el año pasado para ello, de los 21 millones 891 mil 369 pesos que según el presupuesto de egresos se recaudaron, 11 millones 686 mil 699 pesos, más del 50 por ciento del presupuesto total, se fue en la burocracia.
Este es un reflejo fiel del gobierno que está y del que a través del tesorero de “chocolate” se quiere perpetuar en el municipio, apostando todo a quedarse de gobierno, pero sin resolver las necesidades básicas de las personas. Ah, pero eso sí, a Alexis Garay se le ve entregando juguetes con el DIF municipal, porque para eso sí es eficiente: sonreír en las fotos y tratar de comprar el favor con regalos y apoyos.
Osvaldo García