Después de darse a conocer que el presupuesto del municipio de Lerma no solo sirve para comprar “regalitos” que compran voluntades para afianzar una reelección; sino que se desperdicia en el salario de su presidenta del sistema DIF Municipal, la cual no debería recibir sueldo por ser un puesto honorífico; ahora sale a la luz una más de las tantas inconsistencias.
De acuerdo con lo publicado por el propio Ayuntamiento en el Portal de Información Pública de Oficio Mexiquense, durante el último ejercicio fiscal, aparecen una serie de sueldos y salarios que dejan mucho qué desear en cuando equidad y funciones.
Resulta que Miguel Ángel Ramírez Ponce, mantiene en su área, servidores públicos con sueldos excesivos como un consejero Jurídico ganando más de $48 mil pesos brutos mensuales; auxiliares con más de $35 mil mensuales y asesores ganando más de $52 mil pesos mensuales brutos; dinero nada despreciable tratándose de una sola área del Ayuntamiento.
Lo realmente alarmante es que exista un “Asesor” con un sueldo bruto mensual de $58 mil 599 pesos; exactamente lo mismo que gana el tesorero municipal y el Director de Obras públicas; incluso lo mismo que el Secretario del Ayuntamiento y, no lo va usted a creer, el secretario particular también se lleva más de 58 mil pesos mensuales brutos; imagínese usted que el secretario particular del presidente gana lo mismo que el secretario del Ayuntamiento y gana más que el Director de Turismo o el Director de Gobernación; ¿Pos’ qué hace?
Entre asesores y secretarios te veas; pues para muchos ciudadanos, el hecho de que exista este presunto despilfarro se debe al pago de varios favores que llevaron a Ramírez Ponce a su primer mandato y que, pudieron haberle ayudado hoy a ganar la reelección porque, “de algún lado se debía sacar la inversión de las campañas”, dijo una vecina.
Como estas, un sinfín de cuestionables remuneraciones que dejan mucho qué pensar sobre los tejes y manejes de los dineros en Lerma, pero eso se lo iremos desmenuzando en las siguientes ediciones.
Ariz Vega